En meses recientes del 2024, la red social “X” (antes Twitter), sucumbió con algunos de los testimonios de mujeres que eran acosadas por una fémina, llamada Rebeca García, quien mostraba indicios de una conducta para nada típica.
La mujer de 34 años, oriunda de Caracas y residenciada en El Hatillo, del estado Miranda, Venezuela, fue objeto de acusación con pruebas por varias mujeres, víctimas del acoso sexual, amenazas y acercamientos hasta sus domicilios, en un grado total de desorientación y locura.
En esta ocasión, nuestro expediente de Casos más Sonados, se abrirá para descubrir el perfil de Rebeca García, la apodada por algunos medios como “La bebe reno venezolana” (haciendo alusión a la serie de Netflix).
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¿Quién es Rebeca García?
La identidad de esta mujer, de 34 años, se dio a conocer en los primeros días del mes de mayo de 2024, cuando dos usuarios de la red social de microblogging “X”, dieron detalles de sus testimonios.
Ambas mujeres expresaron similitudes de un perfil de acoso y hostigamiento de las que eran víctimas en un día común dentro de “X”.
El nombre de la agresora es Rebeca García, caraqueña, nacida en 1990, hija mayor de un matrimonio de clase media alta del este capitalino.
Según algunos medios internacionales que han dado cobertura al caso, Rebeca es familia por vía materna de Carlos Capriles Ayala, un diplomático en el gobierno de Rafael Caldera.
Por su parte, Rebeca creció en un ambiente que parecía idóneo, junto con su hermano menor, Francisco, recibiendo educación en uno de los mejores colegios de Caracas.
Con el pasar del tiempo, Rebeca trabajó como promotora de una agencia de viajes familiar, llamada “Circumil”, con sede en El Hatillo.
Sin embargo, algo no andaba bien con la muchacha, ya que, desde el año 2015, empezó a desarrollar trastornos en su personalidad, siendo llevada a psiquiatras.
Por si fuera poco, su hermano Francisco, también, padecía de trastornos psicológicos y ese sería el detonante para cometer sus fechorías.
El acoso de Rebeca García
Si bien es cierto, que las denuncias de acoso datan del año 2016, no fue en este 2024, cuando los testimonios salieron a relucir en la red social X.
La primera víctima en identificarse fue la periodista Anny De Trindade, que relató su tormento al que era sujeto cuando conoció a Rebeca.
Del mismo modo, salió otra víctima cuyo nombre de usuario en esa red es @cocoaguirre, mencionando similitudes en el testimonio de la primera mujer.
En ese mismo día, se volvió tendencia en la red social Rebeca García, y el prontuario de víctimas siguió creciendo.
De hecho, una de las usuarias de X, llamada @manicolita refirió padecer durante siete años de constante acoso por parte de García.
Sin embargo, las denuncias no fueron reciente y mencionan las víctimas que sufrieron desde el año 2016 de estos ataques psicopáticos de García.
A pesar de la antigüedad de las denuncias, muchos usuarios preguntaban a las víctimas ¿Por qué no denunciaron antes?, y las respuestas de las afectadas coincidían.
La respuesta era simple, la policía archivaba la denuncia, mencionando que no hay ley que proteja a las mujeres del acoso por parte de otras féminas.
Por ende, las denuncias no procedían y Rebeca era libre de seguir cometiendo hostigamientos, cazando a nuevas víctimas.
El hostigamiento se hace peor
Uno de los testimonios que dejó atónitos, fue el encuentro de una usuaria llamada Andrea Olivieri, quien relató su experiencia con García.
Olivieri menciona en uno de sus post, que conoció a Rebeca por medio de una app de citas popular, llamada “Tinder”.
Al congeniar decidieron encontrarse en un club y apenas, entablaron encuentro, Olivieri notó algo extraño en la otra chica.
Según el testimonio de Olivieri, Rebeca tenía una mirada fija, inquietante y espeluznante, además, de hacer movimientos repetitivos y bruscos con los brazos.
Olivieri notó que la atmósfera cambió para mal, cuando Rebeca la incita a retirarse hacia un sitio apartado del club.
A pesar de la desconfianza, Olivieri accedió y lo peor, vino luego, cuando Rebeca empieza a actuar de una manera particular, como si tuviese la mentalidad de una niña pequeña.
Tras ese encuentro incómodo y bizarro, Olivieri perdió contacto con la mujer y más nunca intercambiaron información.
Testimonios aterradores
Sin embargo, la experiencia de Olivieri fue solo la punta del iceberg, de lo que sería el comportamiento insano de Rebeca García.
Por ejemplo, la usuaria @cocoaguirre relató lo espeluznante que llegó ser Rebeca y el grado de locura y persecución que una mujer puede experimentar en su máxima expresión.
En opinión de Aguirre, recibía regalos, mensajes, cartas de amor y de intimidación, amenazas de muertes y visitas inesperadas en la puerta de su domicilio por parte de Rebeca.
Eso no es todo, Aguirre cuenta que en una ocasión, Rebeca la esperó en la residencia y la forzó a entrar, y en respuesta negativa, la mujer se montó sobre el vehículo de su víctima.
Por otro lado, el testimonio de Aguirre concuerda con la experiencia traumática de la periodista Anny de Trindade, quien detalló, en forma de captura de pantallas, las pruebas que incriminaban a García.
El temor y desasosiego de víctimas
Otra de las víctimas, fue Daniela Belloso, del que poco se conoce de cómo llegó a frecuentar con García.
Belloso detalló que tras los acosos sufridos entre 2016 hasta reciente, decidió emigrar para España.
En Venezuela, sus denuncias nunca procedieron, en cierto modo, a la incompetencia del sistema judicial en el país sudamericano.
Por otro lado, algunas de sus víctimas tuvieron que mudarse no solo de ciudad o de urbanización, sino, también de país como el caso de Belloso.
Al destaparse la olla en X, se descubrió no solo el acoso de Rebeca, sino, también, el abuso de menores de parte de su hermano Francisco.
Los hermanos García huyen a España
Al conocerse las denuncias, los hermanos García deciden cambiar de horizontes, emigrando a España.
De hecho, los familiares y conocidos de los García, mencionaban, que los hermanos padecían de trastornos psiquiátricos y que no le “prestarán atención”.
No obstante, el acecho hacia las víctimas eran brutales y al descubrirse el caso, decidieron partir a Madrid.
Entretanto, en Venezuela la viralización de este caso, hizo que las autoridades venezolanas al menos intentarán impartir justicia.
El fiscal general Tarek William Saab manifestó la orden de detención para ambos hermanos y la deportación desde España.
Al contrario de los rumores y especulaciones, se confirmó la detención de los hermanos por la policía española en un supermercado de Madrid.
Pese al revuelo de este caso, no hay una claridad exacta y la justicia parece tardar ante un hecho que data desde hace 8 años.
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