Ser el máximo responsable de la política de uno de los países más ricos y poderosos del mundo, no es tarea fácil. Sin embargo, han existido un grupo de mandatarios de la Unión Americana que han dado mucho de que hablar, y para ello, presentamos el top 10 de peores presidentes de Estados Unidos.
Ver después: 10 Grandes Genocidas de la Historia (Video)
Los 10 peores presidentes de Estados Unidos
Para este conteo, no colocaremos al actual presidente Joe Biden, porque no ha culminado su mandato, además, nos basaremos en los peores.
Tomaremos como referencia, los momentos históricos del país, sus relaciones con otras potencias y sus acciones que desencadenaron una crisis política en el gigante norteamericano.
Para dar inicio al conteo, el listado iniciará entre el puesto 10 hasta culminar con la posición 1, según nuestra opinión.
10. Herbert Hoover
La crisis económica que golpeó a Estados Unidos fue conocida como la “Gran Depresión”, un hecho que marcó una huella profunda en la historia de esa nación.
El presidente a cargo durante esta grave crisis, fue el republicano Herbert Hoover, quien relevó del mandato a Calvin Coolidge, de la misma tolda política.
Hoover venció en las elecciones presidenciales para 1929, al candidato demócrata Alfred Smith con un rotundo apoyo, debido a sus políticas a favor de la “Ley Seca”.
Por su parte, su administración heredó a un país próspero, para después no decir que la culpa la tuvo su antecesor.
Sin embargo, apenas siete meses en el cargo, sus medidas económicas no fueron las idóneas y el país entró en una profunda crisis.
Este hecho se le llamó “Jueves Negro” y significó, un duro golpe en la economía y activos de los Estados Unidos, gracias, a las erróneas medidas financieras de Hoover.
Se estima, que el detonante fue la ideología extremista de Hoover (que como eran otros tiempos, se consideraba normal y cotidiano).
Su comportamiento racista, elitista y a favor de las deportaciones, fueron la gota que colmó el vaso para explotar la crisis que dejó a millones de norteamericanos sin empleos y con grandes deudas.
Para colmo de males, Hoover intentó reelegirse, esta vez haciendo frente al demócrata Franklin D. Roosevelt, y la victoria abrumadora pasó a manos del otro candidato.
Sin dudas, Hoover se considera en la historia política de Estados Unidos, como uno de los peores presidentes de esa nación.
9. Harry S. Truman
Si el puesto 10 fue de lo peor, por ser el causante de la “Gran Depresión”, no escaló más posiciones, porque el ocupante del peldaño 9, no tuvo grandes problemas económicos, pero su acción en el final de la II Guerra Mundial, fue deplorable.
La muerte sorpresiva de Franklin D. Roosevelt en abril de 1945, supuso un duro golpe en la administración de una de las potencias de los Aliados.
Como era de esperarse, el deceso de Roosevelt, le permitió a su vicepresidente, que en ese momento, ocupaba el cargo, Harry S. Truman, asumir la dirigencia de Estados Unidos.
Truman heredó el final de la II Guerra Mundial y con una victoria casi incuestionable de los Aliados sobre las Potencias del Eje.
En Europa, Alemania estaba fuera del combate, Italia había firmado un acuerdo de paz por debajo de la mesa y Japón se mantenía de pie con más honor que victoria.
Estados Unidos conquistaba territorios en el Pacífico asiático, y Japón sufría bajas importantes, preparándose para una derrota.
No obstante, existía un proyecto que trabajaba en la bomba atómica y que en su momento, Roosevelt no dio el visto bueno en una guerra prácticamente acabada.
Al morir Roosevelt, Truman se hizo cargo y tras ser convencido por el alto mando militar estadounidense, dio luz verde al desarrollo de la bomba atómica y, también, a su ejecución.
En agosto de 1945, Estados Unidos tenía la guerra ganada ante los japoneses y dos ciudades repletas de civiles, fueron testigos del terror.
Hiroshima y Nagazaki fueron blancos de dos bombas atómicas, que dejó huella en la historia de Japón, y terminó de sepultar el orgullo nipón en la guerra.
Se dice que la población estadounidense se volcó en contra de Truman, y su popularidad lo certifica como uno de los peores presidentes de Estados Unidos.
8. Warren Harding
El puesto 8 es sumamente particular, y es que solo duró dos años en el cargo, pero fueron suficientes para ser uno de los presidentes de Estados Unidos más corruptos de la historia.
Warren Harding se convirtió en el mandatario número 21 de Estados Unidos, por cosas del azar, ya que no era considerado como el segundo tras la muerte inesperada de Theodore Roosvelt, presidente en aquel entonces.
Roosevelt era un amplio favorito de hacerse con la reelección, pero su muerte, permitió que se elegiría el candidato republicano en las elecciones de 1920.
Sin embargo, su elección como candidato presidencial por el Partido Republicano, generó cierto malestar, debido a su “incapacidad” como político.
En medio de la poca recepción, Harding ganó una cuestionadas elecciones presidenciales y nada más llegar, los problemas siguieron.
Los escándalos de corrupción y de incapacidad para gobernar a la nación más poderosa del mundo, le pasó factura a la salud de Harding.
Escándalos van y vinieron; salpicando a la administración Harding, sumándose al enriquecimiento ilícito que fueron objetos miembros del gabinete.
El problema es que los escándalos vinieron de personas que Harding colocó sin experiencia política y a dedo, es decir, compadres y camarillas de su entorno.
Finalmente, Harding falleció el 2 de agosto de 1923 de un ataque cardiaco, cumpliendo la mitad de su periodo presidencial.
7. John Tyler
En la posición 7, se encuentra John Tyler, el décimo presidente estadounidense, cuyo mandata fue totalmente polémico.
Su cargo como mandatario surgió tras la muerte del presidente en funciones, William Henry Harrison, y en ese momento, Tyler era su vicepresidente.
Como presidente, realizó medidas irracionales, separándose de su tolda política, el extinto Partido Whig.
De hecho, la mayoría de su gabinete renunció y tras ello, abrazó otra vía, desligándose de los partidos tradicionales.
Aunque, no fue elegido por votación, se molestó en cierta medida del intinerato y de sus colegas whig, a los que enfrentó con medidas un poco ortodoxas.
Tanto fue la ruptura con sus antiguos colegas, que intentaron por todos los medios de inhabilitarlo políticamente, pero no lo lograron.
Tyler siguió haciendo caso omiso a las recomendaciones de su gabinete y derogó leyes que le competían al senado.
Dos acciones fueron recordadas por el gobierno de Tyler, como fue la Ley de Preferencia, que permitía a los colonos obtener extensas cantidades de tierra y firmar el anexo de Texas a la Unión Americana.
Finalmente, Tyler murió el 18 de enero de 1862, siendo recordado como uno de los peores presidentes en la historia de Estados Unidos.
6. Franklin Pierce
Otro mandatario que dejó mucho de que hablar, fue el presidente Franklin Pierce, que muchos estadounidenses ni recuerdan por su poca popularidad y acción.
Abanderado de los demócratas, llegó a la presidencia, el 4 de marzo de 1853, y su misión fue exterminar los movimiento abolicionistas en el país norteamericano.
Una de las acciones más polémicas, fue la firma de la Ley de Kansas-Nebraska, que evitaba la promulgación de la esclavitud.
Esta nueva ley, encendió las alarmas de una posible Guerra Civil, que se desarrolló, tiempo después.
La esperanza de los demócratas pasaban que la ley de Tyler fuera un rumor, pero cuando se firmó, estalló una cruenta guerra en territorio americano.
Mientras, el país se sumergía en un caos, un político republicano de origen whig, se opuso férreamente a la ley, y años después, se convertiría en presidente, y ese fue Abraham Lincoln.
Por otro lado, con la guerra consumada y la popularidad de Pierce por los suelos, el gobierno se mostró débil y sin capacidad de reaccionar.
Finalmente, su incapacidad le valió su desprecio dentro de los demócratas y fue rechazado para una posible reelección en 1856.
5. William Henry Harrison
De nuevo, nos quedamos en el siglo XIX, una época que ser presidente de Estados Unidos no era una buena idea.
Sí, hablamos de William Henry Harrison, nos quedamos en el punto de ser el mandatario estadounidense que menos tiempo estuvo en el cargo.
Ahora bien, si fue breve su mandato, por qué se considera uno de los peores, pues, su único accionar le bastó para enfurecer al partido Whig.
Se dice, que su actitud arrogante, poco comunicativo e imponente, puso en evidencia las fracturas internas de los Whig, a tal punto, de dar pie a su desaparición.
Aunque, la fractura interna se terminó de consumar con su sucesor, John Tyler (puesto 7 de la lista), los historiadores mencionan que fue Harrison el que preparó el camino para la extinción de los Whig.
Apenas 30 días en el cargo, Harrison murió de una neumonía, siendo su periodo presidencial el más corto en la historia política de EE. UU.
4. Millard Filmore
El otro ocupante también es del siglo XIX y fue antecesor del presidente Franklin Pierce (puesto 6 de la lista).
Millard Filmore fue el decimotercer presidente estadounidense, miembro del Partido Whig, siendo el último mandatario de su tolda política.
Tres de los presidentes que fueron Whig están en la lista y más de la mitad de todos sus mandatarios, pero suficientes para sepultar a este partido político.
Su ascenso como mandatario se vio empañado por los movimientos esclavistas y el pleno estallido de la Guerra Civil estadounidense.
En vez de aplacar los ánimos de cada bando, se enfrascó a ensalzar su carácter racista y de xenofobia en pleno conflicto.
De hecho, apoyó con normativas la vuelta de los esclavos a sus dueños y se ganó el prestigio de grupos extremistas que pedían la expulsión de los inmigrantes irlandeses.
Su carácter extremista le valió ser impopular dentro de la sociedad estadounidense que cada vez era golpeada por la Guerra Civil.
3. Andrew Johnson
Con la medalla de bronce, entra en el podio de los peores presidentes de Estados Unidos, Andrew Johnson, un mandatario que es considerado por muchos como el peor, pero hasta ser relevado por los otros dos que ocupan el segundo y el primer lugar de la lista.
Su gobierno fue enmarcado por grandes cambios y también por la compra del territorio de Alaska al Imperio ruso.
Sin embargo, el racismo era la premisa dentro de su gobierno, y más con frases que quedaron a la posteridad:
“Este es un país para hombres blancos, y por Dios, mientras yo sea presidente, será un gobierno para hombres blancos”.
Sus decisiones un tanto polémicas lo fueron cavando en su propia tumba política.
Johnson ha sido el primer presidente en ser acusado y también en acudir a un juicio político con la intención de ser destituido.
Pese a que no se llevó a cabo su destitución, sí, fue el detonante para que Johnson renunciará a su cargo, siendo celebrado por todos los Estados Unidos.
2. James Buchanan
En el puesto de plata y como segundo en este curioso listado, debemos hacer mención al presidente James Buchanan.
Ocupando la presidencia de Estados Unidos, Buchanan fue antes, parte del gabinete de Andrew Jackson (el inquilino del puesto 3).
Su mandato inició en los inicios de la Guerra Civil estadounidense, y parecía que cumpliría a cabalidad el mandato con su extenso curriculum.
No obstante, en todos sus intentos por reestablecer la paz en la Unión Americana, lo convirtieron en un monigote y un fracaso como mandatario.
De hecho, los historiadores creen que la incapacidad de Buchanan desencadenó en una guerra que ya estaba declarada años antes, pero falta el “factor X”.
Asimismo, Buchanan negoció con ambas facciones dentro de su gabinete, creando discordia y disecciones en el gabinete.
Por último, algunos cronistas enuncian que cuando Buchanan dejó la presidencia en manos de Lincoln, este le dijo:
«Tú estás tan feliz de entrar en esta casa como yo de abandonarla». A lo que el presidente entrante replicó: «Entonces estás realmente feliz».
1. Richard Nixon
Y por último, el peor presidente en la historia de los Estados Unidos, es, sin lugar a dudas, Richard Nixon.
Hablar de Nixon es recordar de escándalos mayores y de su papel fundamental en los albores de la Guerra Fría.
Su curriculum fue extenso antes de ocupar la silla del Salón Oval de la Casa Blanca, pero tuvo desaciertos que lo llevaron a ser el peor mandatario estadounidense.
A pesar de que estuvo en dos periodos presidenciales entre 1969 hasta 1974, su reputación quedó manchada para siempre, inclusive, años después de su muerte.
Nixon fue vencedor en las elecciones presidenciales de 1968 bajo la bandera republicana sobre el candidato demócrata, Hubert Humphrey.
Su primer mandato trascurrió como la de un presidente “modelo” en Estados Unidos, abogando por la paz, siendo partícipe en el retiro gradual de soldados americanos en Vietnam.
Por su parte, sus medidas económicas parecían encaminar el rumbo de Estados Unidos en los incios de los 70.
Nixon pasó a su segunda elección en 1972, superando al demócrata George McGovern.
Con la popularidad por los cielos, Nixon estaba encaminado para hacer historia en Estados Unidos, pero lo hizo de manera negativa.
El estallido del Escándalo Watergate salpicó a su gabinete y a él mismo, dejando una serie de pruebas de corrupción en su haber.
Asimismo, Nixon negó tener el conocimiento del escándalo, pero era evidente su participación.
Rápidamente, el testimonio de Nixon se llenó de contradicciones hasta que tuvo que declarar la verdad, dejando su reputación en lo más bajo.
Finalmente, Nixon bajo la presión de la Cámara de Representantes, tuvo que dejar su cargo, anunciando su dimisión, el 8 de agosto de 1974.
Por eso, Nixon es considerado como el presidente más corrupto de Estados Unidos y a la vez, el peor en la historia política de ese país.
Consideraciones finales
Para concluir, este listado se basó en la acción o decisiones de los presidentes que conllevaron a su tumba política.
En próximos post, reseñaremos los presidentes más impopulares de Estados Unidos.
¡Nos vemos en una próxima entrega!
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