En cada primavera, se celebra el Año Nuevo Chino, una costumbre anual que se extiende en el este y sudeste de Asia.
Dicha festividad se basa en el ‘Calendario Chino’, que a diferencia, del gregoriano que adopta la mayoría de los países. Este se basa en las fases de la luna y el sol.
Por ejemplo, los meses se contabilizan a partir de cada estación, culminando con otra, así, sucesivamente, siendo denominado ‘calendario lunisolar’.
Partiendo de allí, en el inicio de la primavera, se da comienzo al Año Nuevo Chino, representado cada evento anual por la figura de un animal.
Con lo anteriormente expuesto, explicaremos el origen y evolución del Año Nuevo Chino.
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Calendario lunisolar chino
Como se mencionó previamente, el calendario chino es de tipo lunisolar, es decir, toma en cuenta las diversas etapas o fases del sol y la luna, de allí, su nombre.
Al igual que el calendario gregoriano, hindú o hebreo, por citar estos ejemplos, su estructura se basa en días, meses y años, variando la nomenclatura en cifras.
Sus elementos se basan en días, que se marca de acuerdo con la rotación del eje de la Tierra, partiendo de la medianoche.
Con respecto al mes, se basa en la rotación de la luna, pero en la fase de la luna nueva, donde cada mes tiene una duración aproximada de 29 días.
Entretanto, la fecha de un día, se representa en números que van del 1 al 29 o en algunos casos, 30 días.
Por su parte, el año se marca con la traslación de la Tierra y la llegada del solsticio de invierno, dando comienzo el 22 o 23 de diciembre de cada año.
El año calendario chino, se puede acortar o extender en días, es decir, es variable, dependiendo al día más cercano de la luna nueva.
Por ende, un año del calendario chino puede tener entre 353 días (como mínimo) a 385 días (máximo).
A su vez, las figuras representativas de cada año son animales como rata, cerdo, conejo, dragón, perro, buey, tigre,caballo, serpiente, gallo, mono y oveja.
Origen del calendario chino
El origen del calendario chino parte del año 2697 a. C, donde se adoptó el de cinco ciclos de doce meses.
Por consiguiente, se representa en doce meses y cada mes, representado así mismo, en el mismo número de los animales antes mencionados.
Con respecto al zodiaco lunar chino, se basa en el sistema de constelaciones o las ‘28 mansiones’, que marcará la personalidad de cada persona, dependiendo de la ubicación de las casas lunares.
Sin embargo, existe cierta discrepancia con el origen del calendario chino, ya que, en opinión de algunos historiadores, el verdadero cimiento se dio a partir de la Dinastía Shang, en el año 1300 a. C.
Según la tesis de esta afirmación, sostienen que en el marco de esa dinastía, se obtuvo los primeros registros fidedignos de la adopción del calendario chino.
Evolución
Las costumbres y festividades alusivas al Año Nuevo Chino prosiguieron con el paso del tiempo.
En el siglo XX, con la caída del Imperio chino (Dinastía Qing) en 1911 con la Revuelta de Xinhai, China pasó a instaurarse como una República a partir de 1912.
En ese mismo año, decidió adoptar el calendario gregoriano, sin perder, las costumbres y tradiciones que correspondían al país.
No obstante, la instauración definitiva del calendario gregoriano se dio como tal, en 1929, dejando a un lado la hora global de Pekín, capital de la República de China.
Pese al cambio del nuevo sistema del calendario, China siguió implementando sus costumbres que rápidamente se expandieron a territorios vecinos, anteriormente, ocupados por el dominio chino.
Las festividades del Año Nuevo Chino
Al igual que las costumbres de Occidente y en otras latitudes del mundo, China tiene su particularidad en las celebraciones de su fin de año e inicio de uno nuevo.
La festividad del Año Nuevo Chino inicia con el próximo día equidistante al solsticio de invierno y el equinoccio de primavera.
Lo que significa, que comprende del 22 de diciembre hasta 21 de marzo, aunque, la festividad inicial puede variar, inclusive, hasta el 1 de febrero.
Para muestra un botón, se determina el nuevo año, dependiendo de la proximidad de la luna nueva u oscura, marcando así, el inicio del ciclo lunar y del sol.
Con respecto a las tradiciones, suelen venir acompañadas de entregas de regalos a los niños y adultos como el popular ‘sobre rojo’, donde se guarda pequeños presentes o dinero en efectivo.
De igual forma, está la danza del Dragón, que es similar a las artes marciales y cuya finalidad, es ahuyentar a los espíritus inmundos.
Otras costumbres del Año Nuevo Chino, podemos citar a las coplas Chun Lian, la representación del dios de la riqueza y las comidas típicas como los raviolis chinos y las empanaditas.
Finalmente, esta festividad se ha expandido en todo territorio donde abarque la cultura o colonia china, siendo, parte de la idiosincrasia del gigante asiático.
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