Una de las maravillas del Mundo Antiguo y que cautiva con su esencia y rasgos históricos, es la imponente Gran Muralla China.
Esta estructura data desde el siglo V a. C y que se erigió como una excelsa fortificación, instaurada por las dinastías antiguas en China.
Por su parte, se extiende desde la frontera con la península coreana hasta el desierto de Gobi, bordeando el sur de la Mongolia Interior.
En el siguiente post, abordaremos el origen, datos generales y curiosidades de la Gran Muralla China. ¡Acompáñanos a este fascinante recorrido rumbo a la historia!
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¿Dónde queda la Gran Muralla China?
Se ubica en su mayor proporción en el continente asiático y una pequeña porción de esta imponente estructura en Oceanía.
Para más detalles, su localización se extiende desde la frontera con Corea, pasando el borde del río Yalu hasta la proximidad distal del desierto de Gobi.
A su vez, bordea el extremo sur de Mongolia Interior. Por ende, se presume que la construcción de la Gran Muralla China, era para proteger de los ejércitos vecinos ante una posible conquista.
Origen e historia de la Gran Muralla China
Para remontarnos a la construcción de esta impresionante obra arquitectónica, debemos dividir la historia en cinco partes.
La primera porción se construyó en el año 221 a. C, con la dinastía Qin, durante la incursión de los Reinos Combatientes.
Posterior a la dinastía Qin, el nuevo emperador chino Qin Shi Huang, ordenó extender su longitud hasta la zona norte.
Luego de esta nueva extensión, llegó la dinastía Han, que mandó ampliar las fronteras de la Gran Muralla China.
Sin embargo, la cuarta parte de la historia se conoce como ‘Periodo de baja actividad’, que se extendió con los Tres Reino hasta finales de la dinastía Yuan.
Finalmente, se cumplió con la quinta expansión de la Gran Muralla, con el ascenso de la dinastía Ming.
Durante su primera etapa de construcción, China seguía un modelo político y económico feudal, bajo la autoridad de la dinastía Zhou.
Sin embargo, en el siglo VI a. C, los dominios feudales pasaron anexarse y se establecieron algunos reinos independientes, lo que dio inicio al periodo de los reinos combatientes.
En vista, de las amenazas de sus vecinos, el estado de Qi, una estructura estatal inició la construcción del muro y dos siglos después, el estado de Wei siguió el ejemplo.
Por su parte, los estados de Yan y Zhao siguieron el ejemplo y decidieron construir fortificaciones, que se mantienen todavía en pie.
El material de la construcción de los primeros muros fueron paredes reforzadas de capas de tierra y planchas de madera, cuya estructura permitía mantenerse erguida.
Evolución histórica
Para el año 221 a. C, entra el gobierno de Qin Shi Huang, que se caracterizó por atacar a sus principales opositores, además, de unificar los territorios conquistados.
A partir de allí, se establece la dinastía Qin, cuya ideología era mantener un gobierno central, a expensas de los movimientos profeudales y separatistas.
Con la amenazada de sus vecinos, el emperador Qin manda construir un muro que abarca desde el río Amarillo hasta la frontera norte, para evitar futuras incursiones.
Sin embargo, la tarea era titánica, debido a la extensión (que por cierto es discutida por los historiadores) sobre la muralla construida por la dinastía Qin.
Pese a ello, se basan en otros registros y en la creencia popular, que indica una extensión de 5760 km en la construcción de la muralla por el emperador Qin.
Para el año 210 a. C, la dinastía Han sucede a la Qin, iniciando el gobierno un monarca de origen campesino, Han Gaozu.
Con la unión confederada de los estados, sumado a la derrota contra el general Xiang Yu, decide abandonar el mantenimiento y ampliación de la Gran Muralla.
Pasaron muchas décadas en el completo abandono, hasta que el emperador Han Wudi, reinicia las labores de reforzamiento fronterizo y evitar las incursiones de los Xiongnu.
Mantenimiento de la Gran Muralla China
Para el año 134 a. C, se rompe la tregua de sus antecesores y Han Wudi ataca a los Xiongnu.
Con la victoria, el monarca ordenó seguir ampliando la Gran Muralla China, extendiéndose hasta la futura Ruta de la Seda, erigiéndose unos 400 km de largo.
Posteriormente, llega la dinastía Xin, pero su gobierno fue efímero, hasta la vuelta de los Han, quienes establecieron nuevos reforzamientos en el muro.
Mientras tanto, los Xiongnu se dividieron, unos en favor de la dinastía Han, con quienes cohabitaron, por un bien común; protección hacia la otra porción dividida.
Posteriormente, hacia los años 220 d. C y el periodo final de la dinastía Yuan (1300), la Gran Muralla China entra en un periodo conocido de ‘baja actividad’.
En esa etapa, no hubo reformas de gran consideración, solo la reconstrucción de algunas zonas desgastadas por la época antigua.
Con la llega de la dinastía Ming, la Gran Muralla sufrió de grandes cambios significativos para el año 1449.
La derrota de los Ming contra los Oirates, les hizo mantener nuevas fortificaciones en las fronteras y ampliar más allá de sus dominios.
En esta ocasión, los materiales son diferentes a los que se construyeron en las etapas anteriores, sustituyendo la madera por ladrillos y piedra.
Para el siglo XV, la dinastía Ming reforzó la muralla ante las pretensiones de los manchú.
Popularidad hacia Occidente
La dinastía Qing afín a las pretensiones del Imperio mongol se anexó a China y con ello, la propiedad de la Gran Muralla.
No obstante, las primeras noticias de una muralla fortificada y de grandes proporciones, se encontraron en las memorias de líderes religiosos, en especial, musulmanes.
Según estas crónicas, los árabes fueron los primeros en escuchar sobre esta imponente estructura arquitectónica antigua, para el año 1300.
Sin embargo, la mayor difusión fue con la llegada de los europeos en el siglo XVI a China gobernada por la dinastía Ming.
Rápidamente, la noticia se esparció por toda Europa, que, en ese momento, temía del avance de los llamados ‘tártaros’ (mongoles).
El primer registro europeo fue del monje jesuita portugués Bento de Gois, quién llegó a la puerta de la India y avistó la Gran Muralla China en 1605.
Tras la exploración de conquistadores y exploradores europeos, la Gran Muralla se convirtió de ser un mito a una realidad incuestionable.
Extensión de la Gran Muralla China
El recorrido de la Gran Muralla China aborda las provincias chinas de Gansu, Hebei, Henan, Hubei, Hunan, Jilin, Liaoning, Nignxia, Mongolia Interior, Qinghai, Shaanxi, Shandong, Pekín, Qinghai, Shanxi, Sichuan, Tianjín y Xinjiang.
Por su parte, la extensión total de la Gran Muralla es de 21.196 kilómetros de largo y desde el año de 1987, se considera Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Curiosidades de la Gran Muralla
- Según el libro de Richard Halliburton ‘Second Book of Marvels’ de 1938, esta estructura es la única construcción humana visible desde la Luna.
- Por otro lado, se puede avistar la Gran Muralla de China desde el satélite, siendo una estructura inmensamente imponente.
- Sin embargo, algunos astronautas y el mismo Neil Armstrong negaron sobre la publicación de Halliburton, mencionando que es imposible ver la Gran Muralla China desde la Luna.
- Tiene monumentos y lugares hermanados como las cataratas de Iguazú, pirámides de Egipto, fiordos noruegos y la muralla romana de Lugo.
- Tuvo cuatro grandes modificaciones: año 208 a. C, siglo I d. C, 1138-1198 y la última en 1368, desde aquella época no ha habido nuevos cambios.
- Al menos, el 30% de la Gran Muralla China se conserva.
- Finalmente, en los próximos 20 años, se estima que la fortificación ubicada en la provincia de Gansu, podría desaparecer por las tormentas de arena y erosión.
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