El día de San Valentín es la simbología de los enamorados y en algunas partes del mundo del amor y la amistad.
El 14 de febrero en ciertas regiones del planeta se toma esta fecha en honor a San Valentín con la finalidad de celebrar el amor y la amistad.
En el siguiente post, hablaremos sobre el día de San Valentín: origen y por qué se celebra esta festividad en honor a este santo católico. ¡Acompáñanos!
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¿Quién es San Valentín?
Fue un santo mártir de la Iglesia católica romana, nacido en el año 226 d. C. en Terni (antes, Interamna), un pequeño pueblo en la zona central de Italia.
Aunque se desconoce cuál es el verdadero san Valentín, ya que, existe tres santos, las crónicas de la antigua Roma apunta al nacido de Terni.
Bien sea discutida la verdadera existencia de Valentín de Roma, lo que sí es cierto, es que los tres en cuestión murieron martirizados.
Uno de los Valentines fue médico y realizaba obras benéficas en los poblados pobres de la región capital en Italia.
Por otro lado, fue condenado al martirio por haber casado en secreto a un soldado profesional, acto que era prohibido por el Emperador Claudio II.
Valentín de Roma ante la situación no quiso renunciar a su fe y decidió romper con las leyes impuestas por el Imperio romano.
Por tal motivo, las leyes imperiales ordenaron la detención y posterior ejecución del obispo italiano.
Valentín muere el 14 de febrero de 273 d. C. en Roma y la ejecución fue escrita por el mismo Claudio II y condenado a la decapitación.
Aunque, algunos historiadores atribuyen que el Día de San Valentín se escoge esa fecha por el momento en que los pájaros buscan pareja.
Origen de San Valentín
El origen de esta festividad data años después del martirio de Valentín de Roma, de hecho algunos feligreses recordaban el sacrificio de este santo católico.
Sin embargo, la Iglesia católica optó por la celebración y no la consideró pagana, haciendo alusión a las festividades romanas de aquella época.
El inicio como celebración data a partir del siglo V y cuenta con dos fechas conmemorativas, el 14 de febrero según el cristianismo occidental y el 06 o 20 de julio en el Medio Oriente.
Por otro lado, la connotación religiosa de la festividad se relaciona con el milagro de San Valentín previo a la ejecución cuando le devolvió la vista a una niña.
No obstante, los historiadores mencionan que Valentín (siendo un obispo) se enamoró de una joven y al no renunciar a la fe cristiana, murió decapitado.
La celebración se tornó oficial a partir del papa Gelasio I, ordenando la sustitución de las festividades paganas y tomando el recuerdo de Valentín.
Por lo tanto, las fiestas paganas de a poco se fueron diezmando y la celebración del día de San Valentín empezó a tomar forma en los poblados antiguos.
No todo es color de rosa en cuanto a la celebración, varios sumos pontífices estuvieron en contra en que se celebre esta festividad, al considerarla ‘pagana’.
Uno de ellos, fue Pablo IV que la prohibió dentro de las festividades católicas y más yendo al siglo XX, el Concilio Vaticano II de 1969 decidió eliminarla del calendario litúrgico.
Día de San Valentín en la Actualidad
Pese a que desde 1969, el día de San Valentín quedó eliminado del almanaque litúrgico, esta festividad sigue la secuencia dentro del calendario gregoriano.
Las variaciones que ha sufrido esta celebración ha pasado por diversas épocas, desde la prohibición hasta la restauración de la misma.
La simbología del amor (independientemente de la orientación sexual) y la amistad ha perdurado desde el aspecto comercial y afectivo.
De hecho, en distintos países del Medio Oriente la celebración es similar a la realizada en Occidente y donde los enamorados comparten ese momento especial del año.
El intercambio de regalos (sea secretos o no) es una dinámica que se ha extendido durante la celebración y como momento idóneo para compartir con los seres queridos.
Sin embargo, la fecha titulada ha cambiado en algunas regiones celebrándose en marzo, julio y septiembre.
En la actualidad, la festividad ha traspasado fronteras y se toma la simbología, inclusive el aspecto religioso ha quedo en cierto modo en un segundo plano.
